viernes, 25 de enero de 2008

Ayer tuve un sueño

Ayer tuve un sueño. Soñé que estaba vivo. Que mi corazón rojinegro bombeaba sangre con la misma vitalidad que lo hacia antes. Fue muy extraño, tanto que hasta me pareció cierto. Como si lo hubiera vivido. Sentí que todo era como antes, que esa gente que me quería sin intereses económicos ni de ningún tipo, me seguía queriendo como siempre. Esa gente que venia a jugar al fútbol por necesidad, por vocación, por placer o que simplemente lo hacia para estar cerca mío, estaba de nuevo. Personas de las que yo me había olvidado sin motivo alguno, como si me hubieran hecho algún mal. Personas admirables por su talento y por su integridad, por sus éxitos y por su perseverancia. Perseverancia que los llevo a ponerme en la cima del fútbol argentino, inmortalizando así los años mas gloriosos de mi vida. Pero mas allá de mis recuerdos tengo que confesar que me sentí muy angustiado cuando desperté. Tenía un nudo en la garganta. Una sensación de culpabilidad me acosaba.

Me puse a buscar en mi memoria y me encontré con muchas cosas que no recordaba. Vaya uno a saber porque. Cosas que nadie se olvidaría nunca, momentos que hacen a la realización de cualquiera. Con cuanta gente estoy en deuda, siempre me pregunto como hacer para retribuir algo de todo lo que me dieron, y no se como.

Cuando era un pibe prácticamente que no sabia nada de éxitos ni gloria, empezaron a venir a mi muchachos en plena pubertad buscando alguien que los oriente, que les diera un significado a su vida. Que les inventara una razón para vivir. Muchachos que fueron enseñados y criados por gente de mis entrañas. Que eran contenidos cuando no tenían zapatillas, cuando tenían problemas familiares o cuando ni siquiera tenían la posibilidad de tener un plato de comida en la mesa. Esos muchachos fueron creciendo con los valores que les habían inculcado de jóvenes, fueron poniendo en practica lo que es ser correcto, integro, honesto, perseverante. Vivieron por su propia cuenta que cuando un grupo de personas tiene un objetivo común claro y sensato sin que éste perjudique a nadie, no hay nada ni nadie que pueda impedir que este objetivo se cumpla. Lo han demostrado, obteniendo títulos y reconocimientos de todo tipo. Y esa gente que ayer se crió en mis instalaciones hoy me vuelve a poner en la cima del fútbol argentino recordándole a todo el mundo la inagotable cantera que solía tener haciéndole un homenaje a uno de los mas grandes maestros del fútbol, Jorge Bernardo Griffa, Cantera que hoy se ve devastada por las tempranas ventas de jóvenes que ni siquiera llegan a defender mis colores en primera división. O peor aun, jóvenes que antes de madurar ya son representados por barrabravas. Entonces que fue lo que paso? En que falle yo? O fallaron mis ídolos? Esa gente que prácticamente es parte de mis cimientos. Será que en estos tiempos modernos no hay lugar para las cosas que uno hace por puro sentimiento, sin interés de por medio, solo por pasión. Pasión que hace que siempre se salga adelante, sin importar las adversidades que se presenten. Pasión que hoy solo esta presente cuando hay un partido de fútbol en “el coloso”, pero que el resto de los días esta como ausente. Siento como que ese compromiso que tanta gente tenia por sacarme adelante hoy esta reducido a los recibimientos que tiene el equipo cuando sale al campo de juego, o simplemente a los resultados futbolísticos, mientras mis instalaciones se caen a pedazos. O acaso alguien sufre lo que estoy sufriendo yo?

Gracias a dios si. Hay mucha gente que esta sufriendo lo mismo que yo, gente que hoy esta ausente dentro del club, pero que me lleva consigo a todos lados. Personas que no tienen el lugar que se merecen, pero que siempre se hacen un tiempo para mantenerme vivo. Y estas personas son las que me van a sacar adelante, sin importar a quien ni a que le tengan que hacer frente. No van a parar hasta conseguirlo, porque yo estoy decidido a ponerme de pie nuevamente, y conmigo se van a poner de pie todos ellos, porque tanto ellos, como usted señor Bielsa, somos una sola cosa, nosotros somos NEWELL`S.

Opinión de un leproso escrita el 23/12/2007


jueves, 24 de enero de 2008

Primer amistoso adentro


Newell's ganó con un gol de Donnet, pero el equipo no anduvo y hubo quejas por la cancha: no ayudó.

Saldo positivo. Ajustado, pero positivo. Newell's ganó en su primer amistoso de pretemporada. Fue 1 a 0 a Unión de Mar del Plata -del Torneo Argentino C-, con gol Matías Donnet, de penal. Al equipo de Caruso le costó marcar la diferencia de categoría en el marcador y en el juego. Y la cancha no ayudó ni un poquito al juego.

Se veía venir. Ya en los ensayos solitarios del plantel, cada vez que le tocó hacer fútbol en el Club Banco Provincia de Buenos Aires, hubo molestias por el estado de las canchas. Y ayer se sufrió en pleno amistoso. Caruso ya tenía el equipo armado y preparado. Ante la ausencia prevista de Schiavi -con una molestia en la rodilla izquierda-, el DT paró a: Villar; Aguilar, Spolli, Ré, Quiroga; Nico Cabrera, Bernardello, Scotti, Donnet; Da Silva y Juan Carlos Ferreyra.

Se ganó, se sumaron minutos de fútbol y nada más. Es que el equipo no mostró lo que parecía ser la idea de juego: la presión bien arriba, el juego rápido y por las bandas, para explotar la altura de Ferreyra y las llegadas de los volantes. Está claro que el terreno y los fuertes vientos influyeron, pero los leprosos se repitieron tanto en los pelotazos que el Colorado Ré fue el que más asistió a los puntas. La diferencia llegó de penal: bajaron de atrás a Ferreyra -salió golpeado- y Donnet no perdonó. Sólo dos cambios metió el DT: Vangioni por Ferreyra (pasó Cabrera arriba y Donnet por derecha) y Steinert por Da Silva. El sábado será el segundo juego ante Banfield.